Nuevas oportunidades
Autora: Ana Cristina Sanchez

¿Qué ha sucedido en ti con las situaciones “nuevas”? ¿Cómo son nuestra oportunidad de transformación?
Llegó el verano y pronto termina. Cerramos un ciclo y llegan nuevas oportunidades para reiniciar desde donde te quedaste o desde cero, cambiar tu camino y/o iniciar uno nuevo para llegar a ese destino que buscas con lo que actualmente tienes.
Ahora están por terminar las añoradas vacaciones y vemos cerca el reingreso al colegio y la rutina; más no hay que olvidar que tenemos opciones y decisiones que podemos tomar en cuanto a las oportunidades que se nos han presentado y las que están por venir. Hay cursos ya comenzados para seguir y afianzar conocimientos o para nuevos aprendizajes, campitos de verano, emprendimientos, sueños vivos, etc. Tantas oportunidades nuevas que tenemos todos y que nos brindan ese momento de cambio para empezar de nuevo o mejorar y conseguir tus objetivos.
Algunas personas creen que es muy fácil cambiar el camino, corregir o hasta iniciar de nuevo su rumbo… otros lo ven muy difícil o casi imposible; como si hubiera llegado el fracaso y no haya manera de salir quedando marcado por siempre. Incluso hay muchos que no saben hacia dónde ir y se dejan llevar por la vida sin un rumbo o motivación específica.
Así me dejaba llevar por la vida y probé muchas cosas, pero me era fácil reemplazarlas, olvidarlas, me adaptaba a lo que viniera sin en realidad valorar o tener propósitos futuros claros. Eso sí, veía lo negativo en todo fácilmente y cuando algo no me gustaba lo evitaba y le daba vuelta a la página. Si fallaba o hacía cosas equivocadas era yo misma la juez más crítica y eso complicaba la situación. Me era fácil dejar actividades o cambiarlas por no estar segura de mi misión y lo que quería ser y hacer en mi vida.
De algún modo, todos cargamos nuestra propia cruz y es importante ver hacia el interior (tus pensamientos, emociones, sueños, gustos y habilidades), que veo más importante que lo exterior (estado físico, darle demasiada importancia a lo que piensan otros, trabajar en algo sin considerar lo que en verdad quieres en la vida, vestirte con cierta ropa de modo de encajar en un ambiente, tener un título que quizá no seguiste o elegiste por compromiso…).
Este último año, hemos pasado por cambios inesperados y hemos logrado reflexionar más sobre nosotros mismos y del cómo llevamos nuestra vida de manera más consciente.
¿Qué ha sucedido en ti con las situaciones “nuevas” de enfermedades / trabajos / pérdidas? ¿Al tener errores dentro o fuera de casa, al fallarle a tu equipo, al perder a un ser querido o que pasa por tu mente hasta con la simple y quizá falsa posibilidad de que suceda?
Y de manera todavía más personal; ¿qué sucede o piensas que pueda suceder cuando pasas por una situación personal de vida o muerte que mueve tu vida en todos los sentidos?
Ya hace varios años tuve Cáncer Cerebral. Para quienes no conozcan mucho de este padecimiento; es un Cáncer poco común a comparación de otros tipos, pero de los más mortales, caros y difíciles de sobrellevar por las secuelas; y Gracias a Dios sobreviví y gozo mi vida con una perspectiva diferente.
Estoy aquí para afirmarles que existen milagros. Que las cosas y las personas somos perecederas en cuanto a que existe la creación-nacimiento como también caducidad-muerte. Que en la vida no todo es fácil; más sí hay soluciones.
Lo más difícil en mi experiencia fue por un lado escuchar la noticia, pero en especial toda la experiencia posterior a mi cirugía que me hizo ver y comprender muchas cosas por las que actualmente me considero mejor ser humano y en mejor vida. Mis prioridades han cambiado y ahora sí pienso que el valor no son las cosas que monetariamente valen (sin negar que el dinero facilita o ayuda en algunos aspectos); ni en el “sueño o intención de querer ser” sin perseguirlo e intentarlo. El valor está cuando actúas para alcanzar ese sueño., en lo que se hace y la huella que dejas en los demás. En el sentido de la vida. Ahora entiendo que la oportunidad llega, pero también se va como nuestra vida; y hay que aprovecharla en el momento, decidir si tomarla y hacerla crecer.
Hay oportunidades que no vemos o no aprovechamos, así como otras que al momento de fallar o sentirlas complicadas nos rendimos. La buena noticia es que cada situación tiene dos lados y depende de uno mismo el ver “la otra cara de la moneda” y seguir adelante.
Los esfuerzos y trabajos en el camino pueden parecer interminables o difíciles y que hacen la vida estresante, sin embargo muchas veces esos caminos son retos y están llenos de aprendizajes y/o ganancias futuras. No vemos más allá de lo ya pasado o el presente, más en el momento en que cambias tu perspectiva es cuando, quizá y con reflexión diaria, detectas esas oportunidades para actuar en ellas y mejorar tus circunstancias actuales.
Les quiero compartir que en mi experiencia con Cáncer Cerebral tuve un gran reto de adaptación al mundo con mi nueva ‘terrible’ situación llena de secuelas y un largo tiempo de tristeza y aislamiento. O por lo menos así parecía, pero en realidad era milagroso estar en vida y poder estar con mi familia y además la oportunidad de poder crear mi vida, esa oportunidad de “revivir” e iniciar de cero reconociendo y valorando lo que soy y tengo. Una alternativa de cambio en mis manos que solamente yo podía decidir tomar.
Poco a poco fui viendo que en mi problema había muchos desafíos y que si no actuaba a favor de lo que quería, quedaría estancada; viva, pero sin vida. Re-aprendí a hablar, a caminar, a manejar, a convivir, a escuchar, a reflexionar, a trabajar diferente, a cuidarme y ayudar a los demás. Sobre todo y muy importante, a darle sentido a mi vida con nuevos propósitos pudiendo disfrutar más cada momento y buscar la tranquilidad al perdonar, agradecer, y ver lo bueno de las cosas.
El Cáncer fue una oportunidad de cambio. Una oportunidad de ganar experiencias; de aprender más sobre muchos diferentes ámbitos, así como algo sobre mi y mis circunstancias. Una oportunidad para conocer, buscar un desarrollo gradual y crecer mental, espiritual y emocionalmente. La crisis que viví me hizo trascender.
Haber sido agente de cambio como individuo, también ayudo a la familia y al mundo exterior de diferentes maneras.
Cinco tips de los cuales seguramente pueden aprender y unas frases relacionadas que me gustan:
No todo es culpa tuya o de los demás. Reconoce, perdona, agradece… La vida no es una sola situación para siempre. Hay que ver la verdad y sonreír, no pelear. AMAR la vida, y elegir la oportunidad.
Observa el exterior, pero también a tu interior. Hay que cambiar para trascender. No dejemos lo que queremos y podemos hacer con prudencia para no limitarnos o afectar al prójimo .
Considera cuál es tu presente (lo que tienes, lo que conoces, tus habilidades) y cómo lo puedes explotarlo en ayuda o servicio de tu prójimo, e incluso tener ganancias. Ahora tengo más tranquilidad y satisfacción en mi vida porque existe un balance. Paso más tiempo con mi familia, ha crecido mi fe, descubrí una nueva habilidad de pintar y ese gusto al arte y la creación me ha llevado a compartir y vender las pinturas., y también apoyo a padecientes y sus familiares del Cáncer Cerebral especialmente en acompañamiento y orientación.
Recupera o busca el sentido. Si te defrauda porque te es cansado, te somete y ahoga, evalúa si en verdad es para tí. Puedes cambiar tu dirección y buscar otro que le de sentido a la vida y lo puedes ir logrando poco a poco. Hay que estar alertas. Si lo que decides hacer te gusta, lo piensas seguido y ayuda; persigue /trabaja para alanzarlo. Hay esperanza. Creé y estudié para desarrollar y crecer ese sueño de ayudar a otros en las mismas o parecidas circunstancias contando con bases además de la experiencia. El conocimiento de cierta manera da poder y en veracidad y seguridad. Planeé la fundación a través de mis necesidades vividas, el estudio de lo que involucra esto, y lo que existe a mi alrededor. Llegó un punto en el que me lancé sabiendo que si no actuaba podía perder la oportunidad en la espera a que llegue el momento.
No esperes y no te rindas. Las cosas cuestan y no se dan por sí mismas; hay que prepararnos y luchar por alcanzar nuestros objetivos. Tener dificultades en el camino no significa que debas parar por completo, si no que generalmente estas pruebas nos dan aprendizajes y nos fortalecen para solucionar y seguir. Hay que quitar de la mente el miedo al no poder y estar abiertos a tomar otros caminos cuando te sea necesario para lograr ese objetivo. Está bien que sea poco a poco y en diferentes casos los retos que enfrentamos sirven para robustecer tu proyecto, afianzar capacidades y tener un mejor criterio de lo que estarás haciendo., pero no lo sueltes.
“La crisis es necesaria para que la humanidad avance. Solo en momentos de crisis surgen las grandes mentes.” Albert Einstein
“A veces observamos tanto tiempo una puerta que se cierra que vemos demasiado tarde la que está abierta.” Alexander Graham Bell
“En medio de la dificultad reside la Oportunidad.” Albert Einstein